Aunque a priori suene a eso, un oxímoron no es ni un dios escandinavo ni, tampoco, una especie de pájaro en extinción de la Selva del Amazonas. Siento desilusionar, un oxímoron se define como un recurso de lógica literaria que consiste en usar conceptos de significado opuesto en una sola expresión.
Por supuesto encontramos oxímoros en poesía. Ejemplos tales como: “claro oscuro” o “sol de medianoche” nos trasladan a situaciones románticas y nostálgicas propias de la lírica. Pero, sin ir tan lejos, verán que algunos también forman parte de nuestra cotidianidad. Éste es el caso de los muertos vivientes o de la salsa agridulce.
Lo que más me ha llamado la atención de ellos, lo más paradójico del caso podría decir, es que los oxímoros crecen en nuestro lenguaje a medida que las ciencias – y con ella las industrias – avanzan. Por si no me creen, aquí tienen expresiones como realidad virtual, lavado en seco, martillo de goma o cerveza sin alcohol. Curioso ¿verdad? Pues permítanme una más a la colección: poli metacrilato de metilo elástico.
Verán, la necesidad sale de un problema; un problema se crea cuando algo no está resuelto y cuando algo no está resuelto es porque no existe la solución y si no existe la solución es que debemos inventarla y he aquí nuestro oxímoron.
Lejos de parecer el maestro Yoda de los materiales, lo que les digo es cierto: El metacrilato de metilo es un material ligero, transparente y muy resistente aunque a su vez muy rígido; desde el sector técnico de la construcción existe la necesidad que no rompa tan cristalinamente, que no fisure. Es decir, necesito un poli metacrilato de metilo elástico como una goma.
De este último oxímoron, el poli metacrilato de metilo elástico, puedo hablarles ya que en mayor o menor grado contribuyo a su realización. Aunque para ello deberán permitirme que les hable primero de la elasticidad de los materiales.
Como seguramente ya sabrán, los científicos solemos ser poco poéticos y definimos las cosas fríamente a través de números y unidades. Para definir la elasticidad de un material usamos la Tg (Té subgé). Acrónimo de temperatura de transición vítrea.
Sí, lo de la g con vítrea no casa, lo sé, otro día lo cuento.
Como les decía, el valor Tg me indica la elasticidad de un material en función de la temperatura a la que se encuentra. Así si un material me dicen que tiene una Tg de cien grados, pues sé que hasta que la temperatura ambiente no llegue a esos cien grados no se comportará como una goma elástica. Vaya, que no tendrá la propiedad de elasticidad a temperatura ambiente. Del mismo modo, si un material tiene un valor de Tg de menos dos grados pues sé que a temperatura ambiente podré usarlo por sus propiedades elásticas.
Entonces, si la Tg del polimetacrilato de metilo era de unos cien grados, la solución estaba en rebajarla hasta los quince o veinte grados para disponer de un material elástico a temperatura ambiente. Ya está, hasta aquí parece fácil, ¿verdad?
Uno de los factores que mayormente condiciona la temperatura de transición vítrea es la naturaleza de los enlaces intermoleculares
Es decir, la unión entre los distintos monómeros del polímero. Cuanto más alto es el valor Tg de un material, mayor rigidez o dificultad de movimiento tienen los enlaces entre moléculas. Vaya, que son fuertes y no se sueltan con facilidad.
El metacrilato de metilo al unirse entre sí formando el polímero poli metacrilato de metilo, conocido con las siglas PMMA, deja unos enlaces rígidos sin capacidad de rotación o fluencia.
En el fondo es como un juego de piezas de lego, cuanto más fuerte y directa es la unión entre dos pavimentos menor rotación tienen después. Para romper esta rigidez debo introducir una pieza discordante y contraria entre ellas que les de juego.
Pues, así mismo sucede en la química del poli metacrilato de metilo elástico, es necesario añadir entre las dos moléculas una “pieza” que permita la rotación de sus enlaces. De esta forma se logra un material con propiedades elásticas.
He aquí el poli metacrilato de metilo elástico, que a diferencia de lo que muchos conocen como acrilatos, retícula igual que el metacrilato de metilo. Es decir, polimeriza igual que el metacrilato de metilo formando una red tridimensional de enlaces pero que a diferencia de un acrilato no contiene disolventes ni diluyentes que supongan un curado por secado.
Aunque así explicado parezca fácil, no es un juego de niños, la investigación de este material ha supuesto años de investigación que finalmente han logrado dar respuesta a una necesidad sobretodo en materiales plásticos técnicos.
Los oxímoros no son un descubrimiento, ni un dios escandinavo ni un ave amazónica en peligro de extinción. Son una creación, algo que no existía ahora existe en todo su significado y significante. Se han ganado su puesto en el limbo de nuestro lenguaje y merece ser reconocido el esfuerzo que conlleva su creación.